En el sistema de riego del jardín de la piscina hay un escape, un pequeño goteo que teníamos que haber arreglado. Pero lo que són las cosas, lo vas dejando... y ahora es un pequeño humedal de 2 m2 se ha ido poblando de plantas varias en un pequeño laguito (charquito) de aguas limpias. Joaquín decidió dejarlo tal como estaba y se ha convertido un bebedero de pájaros y animales nocturnos: musarañas, ratones careto y otras que ni sabemos. En fin un pequeño espacio lleno de vida, un minúsculo ecosistema que se ha poblado de unas vistosas ranitas verdes que son un amor. Hace un par de días descubrimos que a nuestras ranitas, que han crecido un montón, por cierto, les gusta saltar a nadar libremente por la piscina. Esperemos que nadie tenga inconveniente en compartir un baño con las ranas. Hemos avistado de nuevo al camaleón, continúa viviendo en el huerto, escondido no sabemos donde pero hemos podido hacerle unas fotitos.
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